Las otras cosas que extraño
Son demasiadas las cosas que empiezas a extrañar ya cuando se pierde de vista el puerto de la Guaira, cuando estas montando en el avión que te está llevando a tu segunda vida, a esa vida de emigrante que nunca soñaste, la que te separa de Venezuela, empiezas a recordar las cosas que ya no vas a tener por un buen rato o en algunos casos las que tal vez jamas volverás a tener, en redes sociales y con amistades he visto que muchos extrañan lo obvio, familia, amigos, mascotas, su casa o carro, su estilo de vida antes que el país se volviera lo que es hoy, pero también he visto como se pueden añorar cosas diferentes como por ejemplo la comida china de Venezuela, piénsenlo por un segundo, es comida china, no es algo autóctono, pero aun así se extraña, a veces critican la del exterior y que no se compara jamás con la "nuestra" pero en mi caso, irónicamente me uno a ese pensar pues aunque disfruto mucho la comida china ecuatoriana y no la critico como otros, pues me gustaría que mi arroz venga con su chop suey , su pollito agridulce, lumpia y unas costillas sal y pimienta, cosa completamente ausente en los chifas ecuatorianos, las empanadas son otro plato que los venezolanos que estamos lejos extrañamos mucho, y así hay mucho mas que contar entre ellos, la malta, diablito, cheez whiz, y que decir de lo que se nos ocurre pedir cuando nos enteramos que alguien de Venezuela viene, ron, sambas, cocosettes, y todas esas chucherías que aunque de seguro en la tienda de la esquina conseguimos su versión local no nos gusta para nada.
El propósito de este post (aparte de volver a escribir en blogger) es dejar escrito lo que en estos momento extraño bastante, recuerdo que se me estaba haciendo costumbre los domingos agarrar una lata de atún, una lata de pepitona picante, otra lata de sardinas y picarle una cebolla, tal vez un tomate, meter todo eso en un bowl y añadirle sal y un poco de pimienta y claro la mayonesa siempre presente en mis recetas, abrir unos cuatro paquetes de galletas de soda y servirme un vaso corto para ver como el dulce y seco sabor de un ron (cacique o pecho cuadrado) se acomoda entre los cuatro cubos de hielo, luego sentarme como todo un Homero Simpson endogeno frente al televisor y colocar el primer partido de fútbol que estuvieran trasmitiendo (aunque confieso que siempre buscaba un Real Madrid o un Deportivo Tachira).
Eso, eso extraño!
Entre otras muchas cosas mas...
Comentarios