Cuando conoci una Geisha

8:30 am El metro de caracas full en el andén, retraso común, una niña vestida deportiva, un mono azul, franelilla blanca, piel muy bien bronceada muestra la marca del traje de baño, cabello mojado aun, con un olor más que agradable, mientras espera al igual que la multitud que llegue el tren, saca de su koala maquillaje y desde la tranquilidad que sus audífonos le dan se dispone a maquillarse, queda bella, le veo la cara, blanca y muy bien maquillada queda, ojos un poco rasgados hacen recordar la belleza de una Geisha, llega el tren, nos montamos, ella y yo somos los últimos en entrar al vagón, quedamos muy unidos, siento el roce de su brazo en el mío, confirmo que tiene piel suave (Ya me lo había imaginado), muestra interés en mí, yo no puedo evitar verla, el tren arranca, se queda parado en mitad del túnel, pasan los minutos, la gente se desespera, no hay aire, muchas personas de mal humor, los roces entre cada persona cada vez son mas incómodos, una señora se sienta y todas las personas quedan en otras posiciones a como estábamos, ya no la tengo a mi lado, ya no puedo verle la cara, estoy a cierta distancia, ella se olvida de mí, yo me quedo con su fotografía en mi mente, lo bella que es, una Geisha Venezolana y deportista, llegamos a Parque del Este, me tengo que bajar para que los demás se bajen, ella va a pasar por mi lado, mi atención entera le pertenece, viene a mí, le veré la cara por última vez? Eso pienso!..... ya va!!! Es la misma chama!? Que paso??? Y la Geisha??? El sudor dentro del vagón fue tal, que el maquillaje ya no está, sigue siendo bella, pero dejo de ser Geisha…
Me quedó la imagen de su figura subiendo las escaleras en un pequeño trote, mientras yo me metía al sauna de nuevo!
Tanto me impacto que aquí le dejo un recordatorio, espero que en algún momento le muestre este post.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Me encantan este tipo de post, donde te hacen volar la imaginación y recrear el momento. Excelente.